La periferia de la arquitectura

El desarrollo de disciplinas profesionales por la tangente siempre ha existido, llevando a derroteros menos habituales y a priori menos profesionales. ¿Es menos arquitecto el que promueve la arquitectura que el que construye centros comerciales?

El siglo XXI ya se puede calificar como el siglo de los cambios veloces. En el desarrollo de la arquitectura profesional, somos nómadas polifacéticos y polivalentes. Viajamos, parece que no tenemos apego a ningún lugar/situación o persona porque podemos cambiar constantemente. No es que antes no hubiera arquitectos así, es que eran menos (o no se daban a conocer tanto por la ausencia de la velocidad de las redes sociales).

En la arquitectura empiezan a nacer proyectos que, lejos de levantar muros de medio pié de ladrillo o rehabilitar la estructura de una iglesia románica de un pueblo en el valle del Boí, se comprometen con la educación, rehabilitan espacios desactivados en grandes ciudades, lanzan proyectos para educar en urbanismo social, proponen nuevas formas de abarcar problemas tradicionales, comparten púbica y gratuitamente la belleza de nuestra disciplina...

Parece que en los últimos 100 años se ha construido suficiente, ahora los arquitectos no (sólo) construimos. 

Así  nace mon-architect.




Comentarios